Los científicos estudian anillos de los árboles como estos para poder determinar cómo era el clima en el pasado. Cada año que pasa el árbol forma un nuevo anillo, haciendo que el tronco sea cada vez más grueso. El grosor de un anillo depende de cómo era el clima durante el año en que se formó.
Imagen cortesía de la Libería de Imágenes Digitales de UCAR.